El presidente de la institución, Sergio Massa, explicó que deben esperar la autorización de la Conmebol y la Aprevide para poder disputar el partido frente a San Pablo
Tigre vive una jornada histórica después de pasar, por primera vez, a una final internacional. Ayer empató con Millonarios de Colombia por la semifinal de la Copa Sudamericana y jugará la última instancia frente a San Pablo de Brasil.
La próxima semana se jugaría el primer encuentro. Sería el jueves en Argentina. Aún no se han definido el horario y el día concreto. Pero más allá de la alegría, Tigre tiene la preocupación de saber dónde jugará. El problema reside en que la cancha de Victoria alojaría menos cantidad de público que lo que la Conmebol exigiría.
“La capacidad es una y la capacidad que te da la Aprevide, que es el organismo de seguridad, no siempre responde a la totalidad de la capacidad que tiene el estadio”, aseguró Sergio Massa en Radio 10. Los directivos de Tigre intentarán hacer lo posible para jugar en Victoria.
El presidente del conjunto que dirige “Pipo” Gorosito explicó que “en los últimos tres años le hicimos algunas reformas al estadio y entendemos que esas reformas obedecen a los actuales requerimientos que pide la Conmebol”. Es decir, que todo dependerá del organismo internacional que organiza la Copa.
“Lo que vamos a hacer es presentar la infraestructura y pedirle a la Aprevide que nos diga con cuánta gente podemos jugar ese partido”, contó Massa. “Lo importante es que el hincha de Tigre pueda vivir este momento único”, sostuvo el presidente de la Institución. Ahora Tigre, sus directivos y su gente deberán esperar.
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